OLEAJE
DE MUERTE ME ENVOLVÍA,
TORRENTES
DESTRUCTORES ME ATERRABAN;
PERO
EN MI ANGUSTIA INVOQUÉ AL SEÑOR
Y ÉL
ESCUCHÓ MI VOZ DESDE SU TEMPLO.
HONOR Y GLORIA A TI, SEÑOR JESÚS.
Dichosos los que
cumplen la palabra del Señor con un corazón bueno y sincero, y perseveran hasta
dar fruto.
Honor y gloria a ti, Señor Jesús.
DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN (7,
40-53)


Nicodemo, aquel que había ido
en otro tiempo a ver a Jesús, y que era fariseo, les dijo: “¿Acaso nuestra ley
condena a un hombre sin oírlo primero y sin averiguar lo que ha hecho?” Ellos
le replicaron: “¿También tú eres galileo? Estudia las Escrituras y verás que de
Galilea no ha salido ningún profeta”. Y después de esto, cada uno de ellos se
fue a su propia casa.
Palabra del Señor.
Que tu amor misericordioso dirija
siempre, Señor, nuestros deseos y actividades, ya que sin tu ayuda no podemos agradarte.
Por Jesucristo nuestro Señor.
Amén.
EN
TI, SEÑOR, ME REFUGIO
No hay comentarios:
Publicar un comentario